La Meta del Ministerio
Esperaba con ansias volver a encontrarme contigo en este espacio de formación hacia nuestro ministerio de música.
En el post anterior reconocimos las funciones del ministerio, y para mí y sé que para ti fue un momento de reflexión y toma de decisiones.Hoy, quiero compartirte finalmente la meta del ministerio, esa gran meta que nos propone Dios Padre a través de su palabra o como llamo en mi libro “El canto de Dios” la sagrada partitura.
Esta meta, como te comenté, la encontramos en efesios 4, 11-13
"11El mismo «dio» a unos el ser apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelizadores; a otros, pastores y maestros, 12.para el recto ordenamiento de los santos en orden a las funciones del ministerio, para edificación del Cuerpo de Cristo, 13.hasta que lleguemos todos a la unidad de la fe y del conocimiento pleno del Hijo de Dios, al estado de hombre perfecto, a la madurez de la plenitud de Cristo."
La meta de nuestro ministerio consta de tres partes o de tres momentos:
1. Unidad de la fe
Nuestro ministerio debe llevarnos a vivir en torno nuestro centro tonal que es Jesucristo, que vibremos en sus alteraciones y nos sintamos reconciliados por el amor que Él derramó en la cruz por ti y por mí.
Hermanos, ¡Cristo es nuestro centro tonal! porque en Él se realiza toda la obra de salvación por medio de su pasión, muerte, resurrección y ascensión.
Este anuncio de fe lo llevamos a cabo por medio del leguaje de los sonidos, que se ha sido el Don que Dios padre nos ha dado para servir en la iglesia y construcción de su cuerpo. Estos sonidos están acompañados por letras en algunos casos, en otros son las melodías que brotan de nuestros instrumentos. Pero todo esto tiene el fin de instruir a al pueblo de Dios y que todos pueden reconocer por fe que ¡Jesucristo es nuestro salvador!
2. Conocimiento del Hijo de Dios
La otra parte de la meta de nuestro ministerio es llevar al pueblo de Dios a tener una relación estrecha con Jesucristo, pero piensa algo hermano, tú le vas a dar el pueblo de Dios lo que tú has vivido de esa relación.
Te lo digo en otras palabras; primero tú debes tener esa estrecha relación con Jesucristo y de esa experiencia y de ese amor lo vas a dar a conocer mediante la música. Perdóname pero no podemos dar a conocer lo que no amamos.
Y preguntarás cómo lo doy a conocer; con tu testimonio.
La otra parte de la meta de nuestro ministerio es llevar al pueblo de Dios a tener una relación estrecha con Jesucristo, pero piensa algo hermano, tú le vas a dar el pueblo de Dios lo que tú has vivido de esa relación.
Te lo digo en otras palabras; primero tú debes tener esa estrecha relación con Jesucristo y de esa experiencia y de ese amor lo vas a dar a conocer mediante la música. Perdóname pero no podemos dar a conocer lo que no amamos.
Y preguntarás cómo lo doy a conocer; con tu testimonio.
3. Testimonio
Testimonio que está basado en una relación con Dios Padre mediante la oración, su palabra o la enseñanza que invita a la formación bíblica para conocer más de su amor, en la vida comunitaria y en la eucaristía. Cuando comienzas a crecer en esta experiencia de fe sientes la necesidad de expresarlo y finalmente manifestarlo mediante canciones, melodías o tu instrumento.
Sabes algo, cuando vives lo que amas, tu instrumento transmite eso, no importa si es la voz, una guitarra, un piano o un instrumento tan complejo como la batería, lo que ese instrumento va a transmitir simplemente es lo que vives, a un Jesucristo vivo y real que te ha redimido y te lleva a vivir una relación de amor con tu Padre Celestial.
Y he aquí la razón fundamental de nuestro ministerio la GRAN META
El Estado del Hombre Perfecto, La madurez de Cristo
La razón de ser de nuestro ministerio musical es que nuestras acciones, nuestra vida, nuestro actuar, nuestras relaciones sean una referencia permanente a nuestra cabeza, o dicho en forma musical a nuestro centro tonal; Jesucristo.
Nuestra vida ministerial musical debe tener las mismas alteraciones que Jesucristo nos enseñó con su ejemplo de vida; la transparencia, la generosidad, la fidelidad al padre, el restaurar a la persona, y relacionarnos con un Dios Padre que nos ama.
Todas estas alteraciones harán que nuestra vida sea un reflejo de Jesucristo, el hombre perfecto, y poder decir como dijo Pablo; No soy yo, es Cristo quien vive en mí.
Gracias por este momento de reflexión que nos hemos dado y para terminar quiero sacar algunas conclusiones que sería bueno que junto con ministerio sacaran las de ustedes
Dios ha puesto en ti un propósito de vida. ¡Descúbrelo!
Una vez lo encuentres pon ese propósito al servicio de otros. ¡ponte en acción!
La meta del Ministerio es que crezcamos en la fe, en el encuentro personal con Jesucristo, hacerlo vida en nosotros y en nuestras acciones, que podamos transparentarlo en nuestro servicio. ¡persevera!
Que nuestro servicio sea una acción salvífica para otros ¡aspira a cosas grandes el cielo es el límite!
Nos vemos en un próximo post,
Dios Siga bendiciendo tu ministerio
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Escrito por
Maestro en música de la Universidad Sergio Arboleda.
Sabes algo, cuando vives lo que amas, tu instrumento transmite eso, no importa si es la voz, una guitarra, un piano o un instrumento tan complejo como la batería, lo que ese instrumento va a transmitir simplemente es lo que vives, a un Jesucristo vivo y real que te ha redimido y te lleva a vivir una relación de amor con tu Padre Celestial.
Y he aquí la razón fundamental de nuestro ministerio la GRAN META
El Estado del Hombre Perfecto, La madurez de Cristo
La razón de ser de nuestro ministerio musical es que nuestras acciones, nuestra vida, nuestro actuar, nuestras relaciones sean una referencia permanente a nuestra cabeza, o dicho en forma musical a nuestro centro tonal; Jesucristo.
Nuestra vida ministerial musical debe tener las mismas alteraciones que Jesucristo nos enseñó con su ejemplo de vida; la transparencia, la generosidad, la fidelidad al padre, el restaurar a la persona, y relacionarnos con un Dios Padre que nos ama.
Todas estas alteraciones harán que nuestra vida sea un reflejo de Jesucristo, el hombre perfecto, y poder decir como dijo Pablo; No soy yo, es Cristo quien vive en mí.
Gracias por este momento de reflexión que nos hemos dado y para terminar quiero sacar algunas conclusiones que sería bueno que junto con ministerio sacaran las de ustedes
Dios ha puesto en ti un propósito de vida. ¡Descúbrelo!
Una vez lo encuentres pon ese propósito al servicio de otros. ¡ponte en acción!
La meta del Ministerio es que crezcamos en la fe, en el encuentro personal con Jesucristo, hacerlo vida en nosotros y en nuestras acciones, que podamos transparentarlo en nuestro servicio. ¡persevera!
Que nuestro servicio sea una acción salvífica para otros ¡aspira a cosas grandes el cielo es el límite!
Nos vemos en un próximo post,
Dios Siga bendiciendo tu ministerio
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Escrito por
José Ricaurte
Predicador y conferencista católicoMaestro en música de la Universidad Sergio Arboleda.
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